Las
cabras junto con las ovejas fueron una de las primeras especies en
ser domesticadas.
Existen restos de cabras en sitios arqueológicos distribuidos
por todo el Creciente Fértil, lo que permite datar la domesticación de ambas
entre los 6.000 a 7.000 años a. C. y las convierte en el primer animal para
pastoreo domesticado en el mundo (Zohary, Tchernov y Kolska Horwitz, 1998, p.
130).
El
antepasado de la oveja se considera el muflón del oeste asiático (Ovis
orientalis), que es el único congénere de la oveja en esa área con el que puede
producir individuos fértiles, pues tienen el mismo número cromosómico (2n=54).
En el caso de la cabra, el principal ancestro
de las razas modernas se considera la cabra bezoar (Capra aegagrus aegagrus) la
cual se distribuye desde las montañas de Asia Menor a través del Medio Este
hasta el Sind (Zohary, Tchernov y Kolska Horwitz, 1998, p. 130).
Sin
embargo, a diferencia de la oveja, la cabra revierte a la condición silvestre o
feral con facilidad si se le da la oportunidad.
Existen actualmente decenas de
razas de cabras en todo el mundo.
En
el caso de los ovinos, a la hembra se la denomina oveja y al macho carnero (que
generalmente presenta grandes cuernos, normalmente largos y en espiral). Las
crías de la oveja son los corderos y los ejemplares jóvenes son conocidos como
moruecos. Un grupo de ovejas conforman un rebaño, piara o majada (Argentina), y
al cercado donde se meten se le denomina aprisco, brete, redil o corral. La
cría y utilización de estos animales por parte del hombre se conoce como
ganadería ovina.
En los caprinos, la hembra se denomina cabra,
el macho se llama cabro, chivato, macho cabrío, castrón o cabrón, y a las crías
cabrito, chivo o chivito.
De
los ganados ovino y caprino se utilizan su carne; su leche, con la que se
elaboran quesos, destacándose los de cabra; la piel, y la lana y otras fibras
del pelo del animal; también se utilizan sus deyecciones como fertilizante.
China es el principal productor de carne y
lana de estos animales, seguido por Nueva Zelanda y España. Turquía y Siria se
destacan en la producción de leche de oveja, mientras que la India, Bangladés y
Sudán lo hacen en la de cabra
Ventajas
de la crianza de Ovinos y caprinos:
.- Los gastos de instalaciones son bajos si los comparamos con los requeridos para la explotación de otras especies de animales domésticos.
.- El manejo de los animales es sencillo, un solo hombre puede manejar un rebaño de 500 ovejas y de un poco menos de cabras, por su condición no gregaria y su tendencia a la producción de leche.
.- Se pueden utilizar terrenos de variada conformación topográfica.
.- Utilizan como forrajes las gramíneas de bajo porte, así como una gran variedad de malezas existentes.
.- Proporcionan al productor, además de carne de excelente calidad, leche, abonos y otros subproductos agro industriales.
.- Se adaptan bien a los distintos tipos de explotaciones, incluyendo las de tipos agro industrial, independiente del contexto ecológico.